La entidad nació con el propósito de acompañar a las poblaciones más desfavorecidas de África, sobre todo de Senegal. Sus ámbitos de actuación principales son tres: la salud, la educación y el empoderamiento femenino. La asociación propone que todas las acciones sean autogestionadas y, por tanto, sostenibles.
Camina Senegal cuenta con tres grupos de arpilleras: Mujeres de Ibel, Mujeres de la isla de Egehid y De la Fundació Ateneu Sant Roc, que se reúnen regularmente a crear piezas de arpillera que luego comercializan. La vida de las mujeres en Senegal ha cambiado drásticamente desde que la asociación les facilitó este lugar de encuentro. En primer lugar, esta iniciativa las ha obligado a tomar decisiones: una característica propia de las actividades artesanas es la de compartir momentos de costura en el que deciden qué crearán y cómo lo harán.
“Os aseguro que allí (en Senegal) que una mujer tome decisiones sobre su vida o sobre lo que ella quiere hacer no es tan habitual”. También han aprendido a negociar y a vender, ya que deben promocionar su trabajo.
Entre las tantas experiencias de las que Mónica ha sido testigo desde la creación de Camina Senegal, destaca cómo la autogestión económica empodera a las mujeres y les facilita la capacidad de decisión. Recuerda una charla en la que las arpilleras compartieron su visión sobre esta nueva oportunidad: “para crecer juntas y tener el objetivo de poder autogestionarnos económicamente, por tanto, Mónica, vamos a luchar como hombres”.
Como reflejo de los valores que su asociación propone, Mónica respondió: “pues yo me voy, porque si solo sabemos luchar como hombres nos hemos equivocado en algo, aquí vamos a luchar como mujeres que es lo que somos y no nos hacen falta hombres para luchar”.
Entre risas y asombro, la respuesta de este grupo de mujeres decididas a cambiar su realidad fue:
“Nos hemos equivocado, lucharemos como mujeres que somos por esta oportunidad de nos das de crecer con este lenguaje textil”.
Las mujeres arpilleras reconocieron la valiosa lección sobre lo que pueden lograr cuando se les ofrece una oportunidad y están dispuestos a luchar por ella.
Los recursos económicos son el motor que permite a Camina Senegal dar respuestas a las necesidades de las comunidades a las que dan apoyo. De allí surge “Dox Senegal”, viajes responsables en los que los viajeros y las viajeras tienen la oportunidad de conocer la “terranda senegalesa” (en Wolof, la lengua más hablada de Senegal, significa hospitalidad).
Organizado por los representantes de la asociación, las personas podrán disfrutar los paisajes, las playas y la gastronomía del país, mientras conocen realidades impactantes y muy distintas a las propias.
“Es un intercambio que nos va a permitir crecer a ambos lados del mar”
La entrevista completa que MOIRAS le hizo a Mónica Moro para conocer mejor su proyecto de CAMINA SENEGAL