Las manos, el corazón y la cabeza detrás de tus complementos sostenibles.
Antes de nada, seguro que te estás preguntando de dónde viene el nombre Pángala. Pues bien, mi sobrino de pequeño empezó a repetir tanto esta palabra (asumimos que la aprendió de un amigo del cole y que significaba mosca en otro idioma) que se convirtió casi en el emblema de la familia. Así que cuando tuve que buscar nombre y logo para este nuevo hogar no lo dudé.
Todo empezó con una máquina de coser.
Mi madre, que cosía para ella y todas sus hijas, se empeñó en ayudarnos a encontrar para cada una de nosotras aquello que nos aportara calma. Para el día a día y sobre todo para los momentos de frustración. Acabé tejiendo, hilvanando y sobrehilando durante años. Y aunque nunca toqué su máquina, observaba a mi madre mientras yo fantaseaba sobre cómo enhebrar su Singer.
“Los complementos hechos con calma para personas que disfrutan la vida”.
La misión de proteger el planeta, el comercio local y la diferenciación en cada pieza.