Lejos de hacernos sentir culpables, la organización Fashion Revolution nos invita a tomar acción y ser agentes de cambio a través de diversas acciones que puedes poner en práctica desde ya.

En respuesta al desastre del edificio Rana Plaza en Bangladesh, donde murieron más de 1000 personas, las diseñadoras Carry Somers y Orsola de Castro fundaron la Fashion Revolution. 

Este movimiento global sin fines de lucro y con equipos en más de 100 países de todo el mundo, realiza campañas anuales que promueven la reforma sistémica de la Industria de la moda como la gran conocida Fashion Revolution Week.

Entienden la moda como una influencia positiva a la que hay que analizar, para poder dar a conocer los problemas más dañinos de las prácticas de esta industria.

Con el punto de mira en la necesidad de una mayor transparencia en la cadena de suministro de la moda, elaboran año tras año el conocido Fashion Transparency Index.

Pero, ¿qué es el Fashion Transparency Index?

El Fashion Transparency Index, es una herramienta que se encarga de revisar las principales marcas y minoristas de moda más grandes del mundo, para clasificarlas de acuerdo a la cantidad de información que publican sobre sus  políticas, prácticas e impactos sociales y ambientales.

¿Su objetivo? Incentivar e impulsar a las grandes marcas a ser más transparentes y divulgar la mayor cantidad de información posible. 

Este índice no es sinónimo de sostenibilidad. Aunque se revela información sobre las políticas y prácticas de una marca, esto no significa que estas actúen de manera ética y sostenible. Sin embargo, debemos tener en cuenta que sin transparencia no podemos ver ni proteger a las personas vulnerables ni al planeta.

¿Cómo funciona?

El índice fue creado con el objetivo de responsabilizar a las marcas a través de la transparencia y, utiliza una metodología de calificación para luego categorizar dichas marcas en una lista de clasificación. 

Cada marca obtiene puntos a través de la información que divulga públicamente, ya sea a través de la plataforma digital de la empresa, informes anuales o enlaces a divulgaciones. Los puntos se convierten en porcentaje y a partir de los números obtenidos, se realiza el ranking.

Las 5 áreas claves para la clasificación

El índice de transparencia se basa en cinco categorías que definirán la clasificación de las empresas de moda. Cada una de las categorías responde a una o varias preguntas.

1. En la primera categoría, Políticas y Compromisos, es necesario conocer cuáles son las políticas y procedimientos de los derechos humanos y medioambientales de las empresas.
2. Gobernabilidad es la segunda categoría, y en ella, se hace una investigación sobre quién es el responsable dentro de las empresas de los impactos tanto sociales como ambientales.
3. La tercera categoría es la Trazabilidad. Aquí se realiza un trabajo de rastreo para poder saber si las empresas publican la lista de sus proveedores, y cómo de detallada es la información que muestran al público. Teniendo en cuenta sobretodo,  la materia prima utilizada y la fabricación.
4. En la cuarta categoría, Asesoramiento y Resolución de problemas una vez detectados, la organización se pregunta cómo es evaluada la implementación de políticas de los proveedores de las marcas y si estas comparten los resultados de las evaluaciones. Además, se centra en la manera en que las empresas solucionan los problemas que aparecen en las instalaciones de sus proveedores y cómo pueden los trabajadores denunciar quejas de manera formal.
5. En el año 2020, fue incluida una nueva categoría, Problemas Destacados. Esta quinta categoría ha sido elegida para centrarse en tres asuntos que tienen relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS):

• El modo en que las empresas del sector de la moda abordan la discriminación y la violencia de género, dentro de las cadenas de producción y suministro, apoyando la igualdad de género y fomentando el empoderamiento femenino.
• Información y transparencia sobre el pago de salarios dignos a todos los empleados y cómo se movilizan en torno a la creación de sindicatos para poder negociar de manera colectiva.
• Qué están haciendo las empresas para ocuparse de temas como el desperdicio, el reciclaje y los vertidos tóxicos, entre otros, y cómo plantean estrategias para avanzar hacia una economía circular.

La transparencia es un medio para cambiar, no un fin

Fashion Revolution se muestra firme ante el mensaje que quiere transmitir. Es decir, la transparencia por sí sola no representa el tipo de cambio que nos gustaría ver para la industria de la moda, pero da un pequeño empujón para llegar hacia los objetivos que se han propuesto. Se centra en cuestiones que muchas veces pasan desapercibidas, tales como: sueldos dignos, igualdad de género, condiciones laborales, comercio justo y sostenibilidad. En pocas palabras, la transparencia es el primer paso para hacer que la industria de la moda sea más justa, segura y sostenible.